Recuérdales estas cosas a todos y ordénales en presencia de Dios que dejen de pelearse por palabras. Esos altercados son inútiles y pueden destruir a los que los oyen. 2 Timoteo 2:14
La paz es un ingrediente tan importante para una vida feliz, pero no es suficiente simplemente desear la paz. En realidad, debemos buscar la paz en nuestra relación con Dios y nuestras relaciones con los demás. Pablo entendió cuán elusiva puede ser la paz a menos que la busquemos diligentemente, porque en varias de sus cartas insta a los creyentes a vivir en armonía.
Para vivir en armonía, debemos estar agradecidos unos por otros, hacer concesiones unos a otros y pasar por alto los errores y faltas de los demás. Debemos ser humildes, amorosos, compasivos y corteses. Ten siempre la disposición para perdonar rápida y frecuentemente, y no te ofendas fácilmente.
La unidad, la armonía y el acuerdo son pacíficos, y los experimentaremos todos si los buscamos con todo nuestro corazón y estamos dispuestos a ser pacificadores a lo largo de la vida.
Oración de Gracias
Padre, cuando me encuentre en una situación en la que me sienta tentado a discutir o reñir, ayúdame a ser un pacificador. Te agradezco por el fruto del dominio propio en mi vida. Y gracias porque puedo vivir en armonía con los que me rodean.
