Pero precisamente por eso Dios fue misericordioso conmigo, a fin de que en mí, el peor de los pecadores, pudiera Cristo Jesús mostrar su infinita bondad. Así llego a servir de ejemplo para los que, creyendo en él, recibirán la vida eterna. 1 Timoteo 1:16
Los matrimonios no son tan buenos como pudieran ser cuando alguien se aferra a las ofensas y daños que su cónyuge le ha causado. Sé que es difícil abrirse por completo cuando has sido lastimado, pero nadie puede prometer que amar a alguien no te lastimará. De hecho, tú realmente no puedes amar sin estar dispuesto a ser lastimado. No es posible.
El amor verdadero muestra misericordia y perdona. El amor continúa dándole a la otra persona otra oportunidad. El amor está dispuesto a seguir confiando en ellos una y otra vez, con la expectativa de que harán lo correcto la próxima vez, creyendo lo mejor de parte de ellos.
Me doy cuenta de que puede haber grandes daños en tu matrimonio, junto con pequeñas cosas con las que tratas a diario. Aun así, debes decidir soltar esa influencia irritante sobre ti. Entonces ora y apóyate en Dios por la gracia y fortaleza para perdonar verdaderamente.
Si estás luchando con la falta de perdón en tu matrimonio, pídele al Señor que te revele lo que te haya hecho sentir amargura o resentimiento. Puede que te sorprenda lo que Él te revele, pero cuando ves la verdad, decides soltar la ofensa. Decide perdonar a tu cónyuge y camina en la paciencia y trátale con el increíble e incondicional amor de Dios.
Oración Final
Dios, quiero que mi matrimonio sea lo mejor posible. Ayúdame a soltar cualquier área de falta de perdón y pacientemente amar a mi cónyuge de la manera en que Tú quieres que lo haga.