Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo. —Juan 16:33
La paz es una de las mayores bendiciones que Dios nos ha dado, y debemos agradecerle por ella todos los días. Simplemente desear una vida de paz no es suficiente. Tienes que buscar la paz en Dios, la paz contigo mismo y la paz con los que te rodean. He descubierto que cuanto más agradecida estoy, más tranquila estoy. La gratitud me ayuda a concentrarme en lo que tengo en lugar de lo que no tengo, lo que me permite concentrarme en mis bendiciones en lugar de preocuparme.
Cuando caminar en paz se convierte en una prioridad, harás el esfuerzo necesario para que esto suceda. Pasé años orando para que Dios me diera paz y finalmente me di cuenta de que Él ya me había dado la paz, pero yo tenía que elegirla. Jesús dijo en Juan 14:27: “La paz les dejo”. Jesús ya ha provisto tu paz. ¡Toma la decisión de caminar en esa paz hoy!
Oración de Gracias
Padre, gracias porque has provisto todo lo que necesito para vivir en paz. Hoy, elijo buscar esa paz y vivir en paz, sabiendo que eres más grande que cualquier prueba o tribulación por la que pueda estar pasando. Tu eres todo lo que necesito. eres mi paz
