
Yo reprendo y disciplino a todos los que amo. Por lo tanto, sé fervoroso y arrepiéntete. Apocalipsis 3:19
Dios ve la convicción, la corrección y la disciplina como algo para celebrar en lugar de algo que nos entristezca o nos frustre. ¿Por qué debemos celebrar cuando Dios nos muestra que algo anda mal con nosotros? El entusiasmo suena como una respuesta extraña, pero en realidad, el hecho de que podamos ver algo a lo que alguna vez estuvimos ciegos es una buena noticia.
Cuando progresamos lo suficiente en nuestra relación con Dios y comenzamos a sentir que estamos fuera de Su voluntad, entonces eso es algo por lo que debemos estar agradecidos. Es un signo de progreso y debe celebrarse con alegría. Cuanto más sirvamos a Dios y estudiemos sus caminos, más sensibles nos volveremos a Su voluntad. Eventualmente crecemos hasta el punto en que sabemos inmediatamente cuando estamos diciendo o haciendo algo que no agrada a Dios, y tenemos la opción de arrepentirnos y comenzar de nuevo.
Oración de Gracias
Estoy agradecido, Padre, porque me amas lo suficiente como para traer corrección e instrucción a mi vida. Gracias porque me estás transformando y haciéndome más como Tu Hijo, Jesús.