Él vino y proclamó paz a ustedes que estaban lejos y paz a los que estaban cerca. Efesios 2:17
¿Disfrutas de un ambiente tranquilo la mayor parte del tiempo? ¿Estás agradecido y eres capaz de mantener tu paz durante las tormentas de la vida? ¿Estás en paz con Dios? ¿Estás en paz contigo mismo? Estas son preguntas importantes. Es bueno hacer un “inventario de paz,” revisando varias áreas de nuestras vidas para ver si necesitamos hacer ajustes en alguna parte.
Jesús dijo que Él nos dio Su paz (ver Juan 14:27). Si Él nos da Su paz, podemos caminar agradecidos en ella y disfrutarla. En el momento en que sentimos que estamos perdiendo la paz, debemos tomar la decisión de calmarnos. He descubierto que cuanto antes me calmo, más fácil es hacerlo. Si me permito estar extremadamente molesto, no solo me afecta emocional, mental y físicamente, sino que es más difícil volver a la paz.
Jesús ha provisto paz para nuestra vida, pero debemos apropiarnos de ella, sin dejar que nuestro corazón se turbe o tenga miedo. No podemos esperar pasivamente a sentirnos en paz. Debemos buscar la paz y negarnos a vivir sin ella.
Oración de Gracias
Padre, gracias por el don de la paz que me has dado. Mientras hago un inventario de mi vida, elijo recibir Tu paz y vivir en ella cada día. Estoy tan agradecido que con Tu ayuda puedo descansar y disfrutar de Tu paz.