Gran remedio es el corazón alegre, pero el ánimo decaído seca los huesos. —Proverbios 17:22
Mi comprensión de la alegría es que cubre una amplia gama de emociones, desde un estado de sereno deleite hasta el regocijo extremo. Los momentos divertidos son divertidos, y todos necesitamos esos momentos de risa hasta que nos duela las costillas. Probablemente no viviremos nuestra vida diaria de esa manera, pero necesitamos esos momentos. ¿Por qué Dios nos dio la capacidad de reír?
Como cristianos, podemos crecer en nuestra capacidad de disfrutar la vida y poder decir: «Vivo mi vida en un estado de sereno deleite.» Creo que un estado de sereno deleite es una mezcla de paz y alegría.
Algunas de las palabras griegas relacionadas con la alegría en la Biblia significan deleite, gozo, excesivo, júbilo, exuberante, regocijarse grandemente…con gran alegría. También he oído que se define como un gran disfrute o felicidad, una fuente de placer o satisfacción, lleno de regocijo para disfrutar.
Cualquiera que sea la definición que prefieras, la triste realidad es que muy pocos creyentes conocen el gozo del Señor. No dejes pasar otro día sin experimentar el reino de Dios en el centro: justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo (Romanos 14:17).
No hay nada tan trágico como estar vivo y no disfrutar de la vida.