Por esto, siempre trato de mantener una conciencia limpia delante de Dios y de toda la gente. —Hechos 24:16
Una forma de vivir más cerca de Dios es mantener el corazón tierno. Tener una conciencia limpia nos permite vivir más cerca de Dios. Nos volvemos sensibles a Su toque y podemos discernir fácilmente cuándo nuestro comportamiento es correcto o incorrecto. Entonces podremos arrepentirnos rápidamente y ser completamente restaurados a una maravillosa y refrescante comunión con Dios.
No pierdas el tiempo inventando excusas por la desobediencia. Cuando Dios te muestre que has hecho algo mal, simplemente di: «Tienes razón, Señor, yo estoy equivocado. No tengo excusa, así que perdóname y ayúdame a no volver a hacerlo.»
Es asombroso cuánto eso te ayudará a mantener una conciencia limpia hacia Dios. Cuando somos sensibles hacia Dios, nos capacita para ser sensibles en nuestro trato con las personas. El mundo está lleno de personas lastimadas, heridas y con el corazón roto que necesitan la bondad y el toque amoroso de Dios. Deja que Dios los toque a través de ti.
Cuando tengas un corazón limpio hacia Dios, escucharás Su voz más clara y obedecerás Su Palabra más fácilmente.