A ti se te ha mostrado todo esto para que sepas que el Señor es Dios, y que no hay otro fuera de él. —Deuteronomio 4:35
La falta de conocimiento causa miedo, pero el conocimiento confiado y seguro elimina el miedo y trae fuerza y valentía. Déjame darte un ejemplo:
Una noche, hace años, estaba acostada en la cama y escuché ruidos extraños provenientes de algún lugar de la casa. Cuanto más los escuchaba, más asustada me ponía. Finalmente, temblando de miedo, salí del dormitorio para ver qué era. Tuve que reírme cuando descubrí que eran cubitos de hielo que caían de la máquina de hielo. Por alguna razón, estaba haciendo un ruido que normalmente no hacía. Debido a que no tenía conocimiento de lo que estaba haciendo ese ruido, estaba innecesariamente asustada.
Así es como la gente a menudo se siente en sus vidas. No saben que Dios los ama, Él está con ellos y les ha provisto todo lo que necesitan, por lo que están aterrorizados por muchas cosas. Cuando oyen hablar de problemas económicos, tienen miedo. Cuando escuchan que no le agradan a alguien, entran en pánico. Cuando escuchan un informe negativo en las noticias de la noche, se aterrorizan.
Si tienes el conocimiento de quién es Dios y quién eres tú en Cristo, el miedo no tendrá cabida en tu vida. No importa cómo se vea la situación en el exterior, tendrás paz en tu corazón, una seguridad confiada que llena cada área de tu vida.
Cuando los sonidos desconocidos del mundo traten de llenarte de temor, confía en que Dios está contigo.
